LA VIRGEN DEL CARMEN, REINA CORONADA DE CHILE.

El glorioso Domingo, 19 de Diciembre de 1926, todo Chile se unió como jamás se había visto en torno de la Virgen del Carmen, en torno de la misma que había visto nacer la República de Chile, la misma que había protegido a los patriotas en gloriosas hazañas patrias. Ese Domingo, la santa Imagen del Carmen, fue CORONADA COMO REINA DE LA NACION!...El legado papal Benedetto Aloisi Masella, sube las gradas del altar monumental, instalado en el parque Cousiño, con las aureas diademas que posa sobre las sienes de la Virgen, como el beso de todo su Chile que la proclama como Reina y Soberana de esta noble nación chilena. ¡Qué momento de emoción!, se vive en el parque, los aplausos y vivas, que atronan y ensordecen los espacios...Nadie quedó indiferente ante esta magna ceremonia, rompen al punto las bandas militares con los sones del himno nacional, como rejuvenecido con aquel acto inolvidable de religión, AMOR Y GRATITUD!!
LA IMAGEN QUE CHILE CORONO:
La imagen que estaba destinada, para recibir tal honor, pertenece a la Cofradía Nacional del Carmen, establecida actualmente en la Parroquia del Sagrario de Santiago de Chile. Durante muchos años la Basílica del Salvador, cobijó la tres veces centenaria cofradía como así mismo, la preciosa imagen Coronada de la Reina de Chile, la cual es definitivamente una OBRA MAESTRA. Su rostro es acogedor, de una belleza serena, tal como el rostro que poseería una Reina ideal, que amara mucho a sus súbditos. Expresa ternura maternal, y candor de niña, su mirada se posa tan suavemente sobre la tierra y sobre sus hijos, cual mariposa se posa sobre la flor...Es mirada clara y transparente; parece acariciar. Es el carmelo de la Tierra Santa...
Nadie hay que al contemplarla, quede indiferente, subyuga...
No es de extrañar entonces que a su paso, por las calles del centro de Santiago, atraiga todas las miradas, todos los vivas, todos los aplausos, durante la Procesión de Septiembre.
Don Macario Ossa, hermano de la antigua cofradía del carmen, nos refiere los orígenes de esta imagen histórica, ante la cual los mismos héroes de la Guerra del Pacífico se postraron, rindiéndole homenajes, y confiando a su corazón de Madre y de Protectora la defensa de esta noble Nación chilena. Escuchemos al propio Macario Ossa: " Tiene más de un siglo, fue mandada a esculpir a Europa por Don José Ramón Ossa y Mercado, a la afamada casa de arte religioso, Rorissier de París, y costó dos mil pesos oro, de 48 peniques. Es de una madera muy fina y se conserva en perfectas condiciones, a pesar de los años. Don José Ramón Ossa, se casó más tarde con la señora María Dolores Ossa vda. de Quesney y vivieron en Copiapó, donde tributaron cultos y novenarios a la imagen. Disuelta la familia, quedó como dueño y señor de la imagen don Valerio Quesney, quien emigró a Santiago y con el noble fin de que recibiera un culto más honorable, la traspasó en legítima venta a la Cofradía Nacional del Carmen el año 1878. Desde esa fecha, la imagen de la Virgen del Carmen es la joya más preciosa con que se enorgullece la gran Cofradía." Hasta aquí el relato de don Macario Ossa, documentado en el libro La Virgen del Carmen y Chile, de don Julio Tadeo Ramírez, publicado por la Editorial difusión el año 1948.
He querido comenzar este Blog, mostrando como primer Estandarte de la Fe en esta nación de Chile, a la Santísima Virgen del Carmen, quien desde sus inicios, ha velado por todos sus hijos, y todas las generaciones de Chilenos la han proclamado SIEMPRE COMO A SU REINA Y MADRE. Ella ha velado por nosostros desde, la estrella solitaria de la bandera, pidamosle que renueve en sus hijos el amor y la gratitud que un día la hizo, nuestra Reina, porque es necesario hacer conciencia en las almas y en el corazon de todos los chilenos que tenemos una REINA...LA VIRGEN DEL CARMEN, LA BELLA FLOR DE NUESTRO CHILE QUERIDO